martes, 21 de agosto de 2012

Conclusiones.




-¿Y como se llega a esa conclusión?

-No se llega a ninguna conclusión, simplemente llega el momento, en el que de repente conoces a alguien, que parece que por arte de magia, te ha estado esperando durante mucho tiempo. No sabes como reaccionar, porque las cosas suceden en un abrir y cerrar de ojos, en un leve pestañeo. No piensas que vaya a ser malo, te imaginas durmiendo solo con ella, buscando sus lunares en la noche, en la oscuridad de la alcoba. Perdiendo el tiempo con cada suspiro eterno, y te sientes bien. No se llega a ninguna conclusión, las palabras son solo un acondicionamiento moderno para definir los sentimientos que no tienen nombre propio. No se ama, porque no puedes llamar algo que es inmaterial con algo tan vulgar.

-Ya, pero como dos personas sin apenas conocerse, deciden ser así de locos.

-No te voy a dar una respuesta para eso, no estas tan loca para entenderla.





Realmente la conclusión está, en que hemos lanzado una moneda al aire, y no hemos mirado que cara salia.

martes, 7 de agosto de 2012

50 peniques.



Lanzas la moneda al aire, y esperas ver el resultado. Como dos trapecistas en el aire, no sabes cual de los dos lados sera el que roce antes el suelo. Esperas acertar, pero no te das cuenta de que no eres tu el único que apuesta, hay otra persona mas. Pero, puede que los dos hayáis apostado por la misma cara, sin importar el resultado final.

jueves, 2 de agosto de 2012

Lunares

Hay algunas sensaciones que nos recorren todo el cuerpo, desde los pies a la cabeza, los dedos y los huesos. Esa sensación es el nacimiento de un lunar, en alguna parte de nuestro cuerpo. Crecen por lo vivido, por lo que se nos hizo sentir en ese momento. Son los recordatorios escondidos en tu piel, en cualquier parte. Y mi misión es hacer crecer y buscar los que yo siembro en las pieles de los demás.



Por eso te desnudo, para ver el momento que nace uno.

miércoles, 1 de agosto de 2012

Manias

Yo no tengo manías. Pero odio todo a lo que se refiere a manías. No soporto que la gente no sepa controlar sus manías. Odio la gente que se muerde las uñas, los que se destrozan los labios por extres, los que son escrupulosos, los que no aguantan ver algo sucio, los que no soportan que las cosas estén desordenadas, todos los que odian a los animales, por ser pajaros, por ser irrazonables, por tener pelo, porque no saben que piensan. 

Todo tiene su limite, y odio tener la manía de odiar las manías de los demás.

Odio la gente que tiene manía el lugar donde viven, donde comen, lo que comen, lo que beben. 
Pero por mas que no quiera, no puedo dejar de sentirme agusto con ellos, por sus odios, por mi odio. 


Me encanta la gente borde, que sabe lo que quiere, los entusiastas, los que no descansan,
los que padecen insomnio, los que duermen como gatos persas sobre sus cojines,
todos ellos son personas vivas, únicas cual formas vivas.